Es muy sencillo ajustar el consumo calórico. Partiendo por ejemplo de la alimentación que   
actualmente tenemos podemos hacer unos pequeños ajustes que nos evitarán muchas calorías innecesarias.     
Se trata de disfrutar de la vida y comer: es un gran placer. Por lo que nosotros debemos saber que no hay prohibiciones de ningún alimento. Solo que se estimarán los más calóricos solo una vez a la semana. De esta manera lo disfrutarás muchísimo más, no te privarás de ellos pero tampoco te engordarán.     
Con unos pequeños ajustes podemos tener unos kilos menos al año sin apenas esfuerzos. Por    ejemplo, el famoso “picoteo”. El problema no es el “picoteo”, ya que el hacer pequeñas comidas al día es bueno, porque el sistema reconoce que no pasa hambre y de esta forma no almacena  energía para momentos de hambre. El problema erradica en lo que “picoteamos”. A la hora de “picotear”, lo mejor es pensar en frutas, verduras, leche de soja o proteína como lonchas (sin pan) de jamón york. Y siempre dejar unas 3 horas desde la última ingestión de alimento.     
Esta única variante, hace que consumas entre 100Kcal. Y 600Kcal. Menos cada día. Si haces una  media 350Kcal. Quedaría un consumo energético menos sin apenas esfuerzo tal que así:  
350Kcal. X 7 (días de la semana) = 2,450Kcal. X 4 (semanas) = 9,800Kcal. Al mes     
¡Es un kilo menos en un mes!. Es indiscutible que merece la pena intentarlo.     
Aunque no todo es color de rosa. Esto sucederá hasta que el cuerpo se adapte a tu nueva forma de comer y vivir.     
By MarilynVint